• ESCENARIO

Un día lluvioso, de esos que sólo te apetece estar en casa delante de la chimenea, Carmen Ávila, esa encantadora y literaturizada profe de lengua con la que comparto mi vida, me propuso representar ante nuestros hijos el mito de Apolo y Dafne. Por supuesto, acepté encantado, y nos lo pasamos estupendamente aquella tarde gris.

Al día siguiente me regaló estos dos poemas tan distintos, uno de Garcilaso y otro de Quevedo, sobre este relato mítico. "Hay muchas maneras de ver las cosas. Léelos y diviértete". Y eso hice.

Cuando acabé, descubrí lo hermoso que es leer, y agradecí a Carmen el que me indicara el camino.

  Ella lo sabía, y yo lo aprendí, pero ... ¿y tú?

• TAREA

La tarea consiste en:

-Infórmate del mito de Apolo y Dafne. Para ello puedes utilizar los siguientes enlaces:

• La coctelera
• El Olimpo
• Ies Pedro de Luna

-Lee el poema de Garcilaso de la Vega en Profes.net (al final de la página) y contesta a las preguntas que allí se formulan.

-Lee y escucha el poema de Francisco de Quevedo. Lee las notas para entenderlo.

-Compara los dos poemas y explica cómo trata cada el tema del rechazo amoroso.

-Busca una imagen en Internet de Apolo y Dafne y añádesela a tu trabajo.

-¿Te atreverías a representar el mito y a hacer una foto de ese momento?

• PRODUCTO

El resultado final, elaborado de forma individual o en equipo, ha de incluir lo siguiente:

a) Un documento en Open Office Espronceda que recoja las respuestas a las preguntas del poema de Garcilaso y el análisis comparativo que has hecho de los dos poemas, junto con una imagen del mito de Apolo y Dafne.

b) Una foto en la que se represente un momento del mito.

• EVALUACIÓN

• CONCLUSIÓN

Incompleto: El trabajo se limita a copiar y pegar información, sin criterios de selección.

Aceptable: La información que se presenta está seleccionada y reelaborada por los alumnos.

Bueno: Selección adecuada de información, reelaborándola en el propio texto e introduciendo comentarios personales.

Espero que hayas disfrutado de los poemas, Y que no esperes a otra tarde lluviosa para seguir leyendo.

Ilustraciones: tomadas a través de Google